Señor, te agradezco por este día.
Perdóname si no he vivido completamente en tu espíritu. Te agradezco por mantenerme sano y por no haberme sucedido nada malo. Perdóname si he hecho injusticias a los demás. Te agradezco por las tareas que este día me ha exigido y en las que he podido poner a prueba mi fuerza y resistencia. Perdóname si no he hecho todo como debía hacerse. Gracias por mis seres queridos en la familia, por su sonrisa, sus palabras amigables, su comprensión y por soportarme. Ayúdalos a perdonarme si he sido descuidado y poco cortés con ellos.
Gracias por la alegría de todo lo hermoso que me ha sucedido hoy. Perdóname si con mi comportamiento he arruinado la alegría de los demás.
Gracias por la esperanza después de cada derrota. Perdóname si he decepcionado a los demás.
Gracias por el consuelo y todo lo hermoso con lo que mi vida está llena, a pesar de todas las dificultades. Haz que otros también encuentren ese consuelo.
Amén.
Recita también esta oración: Gracias por haber terminado este día