Humildemente, pedimos al Señor Excelentísimo, que se preocupa por el dolor humano, e invocamos a Santo Peregrino, su siervo y nuestro protector.
Señor Jesucristo ten piedad de nosotros.
Salvador del mundo.
Creador de la salvación humana.
Poderoso sanador.
San Peregrino, siervo de Dios, ruega por nosotros.
Seguidor de Cristo.
Siervo de la bienaventurada Virgen María.
San Peregrino, ejemplo de vida en el mundo.
San Peregrino, amor ardiente.
San Peregrino, siervo fiel.
San Peregrino, modelo de obediencia.
San Peregrino, siervo pobre.
San Peregrino, siervo sin mancha.
San Peregrino, siervo orado.
San Peregrino, amigo de la Cruz.
San Peregrino, amigo de los ángeles.
San Peregrino, amigo de los pobres.
San Peregrino, hermano de los afligidos.
San Peregrino, protector de los enfermos de cáncer.
San Peregrino, sanado por Jesús con un milagro.
San Peregrino, nuestra esperanza.
San Peregrino, alegría de muchas almas.
San Peregrino, gran intercesor y sanador.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, ten piedad de nosotros, Señor. Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, escúchanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, ten misericordia de nosotros, Señor.
Ruega por nosotros, Santos Peregrino, para que seamos dignos de las promesas de Cristo.
Oremos: Oh Dios, Tú sanaste a tu siervo Santos Peregrino de una enfermedad grave e incurable, te pedimos que por su intercesión obtengamos sanación por tu divina ayuda y lleguemos a Ti, que eres la única vida. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
Para mayor eficacia, recite: La Coronilla a Santos Peregrino