Querido Señor Jesús,
te agradezco por este nuevo día, te agradezco por poder ver y escuchar hoy. Me siento bendecido porque me entiendes y me perdonas, porque has hecho tanto por mí y sigues bendiciendo a mi persona cada día.
Hoy te pido que me perdones por todas las cosas que diré, haré y pensaré, que no sean de tu agrado. Desde ahora te pido perdón. Te pido que me mantengas alejado de todo peligro y mal hoy. Ayúdame a comenzar este día con buenas intenciones y gratitud infinita, mantén mi mente limpia para que pueda escuchar tu voz, habla hasta los límites de mi mente para que pueda aceptar todo sin quejarme y llorar por mí mismo y para que entienda que tú lo controlas todo.
Dame respuestas en momentos difíciles cuando me quede solo con mis limitaciones, úsame para hacer tu voluntad, quiero ser una bendición para los demás, mantenme fuerte para poder ayudar a los débiles, levántame de mis caídas porque quiero animar a aquellos que se sienten perdidos.
En este momento, quiero interceder por todos aquellos que han perdido su camino, por todos aquellos que se sienten condenados y desearían un poco de comprensión, por todos aquellos que no te conocen íntimamente y por todos aquellos que se niegan obstinadamente a creer en ti.
Te agradezco, maravilloso Señor, porque sé que eres el Dios que cambia a las personas y las situaciones. Te pido también por todos mis hermanos para que puedan vivir una vida llena de paz, amor y alegría, y también por todos los que escucharán esta oración para que sepan que ningún problema o circunstancia es más grande que tú, mi único y amado Señor.
En el nombre del Señor, Amén.
Recita también esta oración: Oración matutina breve