¡Oh gloriosa Madre celestial!
A aquellos que han rezado ante tu sagrada imagen, les has concedido numerosas gracias. Lleno/a de confianza, también yo rezo ante tu sagrada imagen: ayúdame en mi aflicción (mencionar la intención).
Sé que no he merecido la gracia, pero confío en el amor infinito de tu Hijo que me ha hecho digno/a del amor del Padre celestial. Convencido/a de tu inmenso amor materno,...